El colegio no es perfecto, pero definitivamente excelente. Gran equilibrio entre amor y disciplina con los estudiantes, y énfasis en la vida personal con Dios de cada uno de ellos.
Nuestra experiencia es sentir al colegio como una familia, la formación de nuestros hijos es basada en la responsabilidad y la creatividad. Nuestros hijos son felices, el tipo de educación personalizada permite que profesores y directivos conozcan muy de cerca a los niños, para nosotros es importante que ellos sean tratados como niños y no como un número. Agradecemos al Gimnasio Campestre los Alisos por los más de 4 años que llevamos perteneciendo a esta gran familia.