Es un placer para nosotros destacar que el jardín ha mostrado un gran profesionalismo y dedicación para el desarrollo y crecimiento de Camila, aquí aprendió a realizar muchas cosas sólita como comer, vestirse, cantar, compartir con otros niños, hablar, realizar obras de arte y bailar ballet.
Que
yo tengo a mi hijo inscrito, y los dos meses que ha estado ahí ya casi es como un sucio asiático, y ya sabe contar las tazas de agua que se le echan al arroz :v