Doy gracias a Dios por éste hermoso colegio, donde educan con amor, respeto, Justicia y verdad. Hacen que los niños sean consientes de cada paso que dan y que obtengan principios y valores que se reflejan no solo en la academia sino personalmente, llevándolos a la excelencia en todos los aspectos.
El colegio no tiene una buena base directivo administrativa, donde la cabeza visible la Sra. Flor Hernandez, es una tirana dictadora que mantiene a los docentes amedrentados y con horarios excecsivamente largos, además se hacen los locos con las liquidaciones finales. El colegio mejoraría si la Rectora dimitiera de su cargo e hiciera unos cuantos diplomados y cursos sobre manejo de personal, ya que la palabra LIDERAZGO le es desconocida,