la educación es excelente, y el desarrollo intelectual y motriz de los niños es definitivamente lo que lo hace el mejor.
El colegio no es perfecto, pero definitivamente excelente. Gran equilibrio entre amor y disciplina con los estudiantes, y énfasis en la vida personal con Dios de cada uno de ellos.
Excelente colegio no solo en lo académico sino en lo personal y social; una institución que forma personas íntegras.