Queremos darles nuestros agradecimientos a Miss Johana y Miss Andrea, porque con su amor y paciencia nos ayudaron a superar la etapa de transición de jardín al colegio para que nuestro hijo tomara sus alimentos más rápido al momento de las onces y almuerzo. También les agradecemos porque hemos visto
El Gimnasio Campestre Beth Shalom es un lugar seguro donde nuestros hijos crecen no solo en el área académica, sino en el área emocional, social y espiritual. Crecen sabiendo que han sido llamados a transformar su entorno y por esto necesitan una formación especial y diferente.