de nuevos retos, cambios, crecimiento y aprendizaje por lo que nos sentimos bendecidos por estar acompañados de los docentes, administrativos y en general toda la comunidad, quienes desde nuestra llegada han sido cálidos, afectivos y solidarios.
Estoy agradecida por el aprendizaje de mi hijo y por
Le doy gracias a Dios por el Colegio porque ha sido de gran bendición en nuestra familia. Gracias Beth Shalom por todo el equipo que tiene porque trabajan con amor, corazón y dedicación siempre para agradarle al Señor, han hecho del Colegio el ministerio hermoso que Dios tiene en el corazón para los