Nos sentimos felices, tranquilos y orgullosos de que nuestro hijo haga parte de la maravillosa familia Stanford. Un lugar mágico, con personal idóneo en cada perfil, instalaciones de ensueño, y el cariño y amor que se percibe en cada rincón. No nos queda más que darles las gracias por el maravill
tiene un costo muy alto de pensión cuando no posee un restaurante,solo dan un menú en el día nos invitan a comer todos los días debajo de una carpa con muy altas temperaturas NO existe un solo profesor de nativo para ser bilingue. el nivel academico de los docentes es ctecnico