Bethshalom ha sido una gran bendición para la vida de mi hijo, no solo por su excelente nivel académico sino por su acompañamiento en la formación espiritual.
Recordar es volver a vivir, momentos dulces de nuestra niñez y juventud, gracias EMA TRONCOSO RABELO por darnos esta oportunidad, que lastima estar tan lejos pero mi corazón siempre estará allí, porque mientras tengamos memoria nunca olvidaremos nuestras raíces, espero verlos pronto.
Un gran abraz
Para nosotros es la verdadera extensión de nuestro hogar, cuando nuestra hija asiste a su colegio es como si siguiera en casa, lo mismo sucede con nosotros su familia, es una institución que nos llena de confianza y esperanza con un elemento adicional, la seguridad de saber que estamos rodeados de l