Las hermanas de Bethania desde una mirada actual dejan huellas imborrables de pertenencia, servicio, amor, responsabilidad, autonomía y prenden la llama de la alegría.
Es un colegio donde sus directivos son groseros con los profesores y los padres de familia. La rectora es una mujer prepotente y dominante que no se deja hablar y los profesores no duran, son muy mal pagos y se cansan de tantos abusos.