Son un colegio excluyente que no respeta los derechos de las estudiantes, intransigentes, la educación es de bajo nivel, retire a mi hija de ahí porque hasta al psicólogo me tocó llevarla
Ser ex-alumna de Jesús María me llena de orgullo pues reconozco en mi formación personal un gran sello de gratitud, solidaridad y bondad que dejaron en mi sus directivos y profesores, académicamente cuenta con una exigencia competitiva apoyando las aptitudes de cada estudiante