El colegio necesita invertir en instalaciones físicas y mayor dotación en salones, baños, canchas. Todo esto hace parte de la formación integral de los niños.
El Gimnasio Campestre Beth Shalom es un lugar seguro donde nuestros hijos crecen no solo en el área académica, sino en el área emocional, social y espiritual. Crecen sabiendo que han sido llamados a transformar su entorno y por esto necesitan una formación especial y diferente.