Ser ex-alumna de Jesús María me llena de orgullo pues reconozco en mi formación personal un gran sello de gratitud, solidaridad y bondad que dejaron en mi sus directivos y profesores, académicamente cuenta con una exigencia competitiva apoyando las aptitudes de cada estudiante
Me parece el colmo que despues de 25 años de graduada mis hijos esten tomando clases con los mismos profesores y el mismo metodo, deberian ya decansar con sus pensiones y darles la oportunidad a los docentes nuevos con ideas frescas y asi recuperar la imagen que tenia la institucion hace algunos año